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Que las mujeres estemos donde se toman las decisiones: Por Nataly Rojas Seguel, Seremi de Gobierno, Región del Maule.

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En Chile, más de la mitad de la población somos mujeres. Sin embargo, si miramos quiénes están en las mesas donde se decide el rumbo económico y político del país, la realidad es muy distinta. El 54% de los directorios de las grandes empresas está compuesto solo por hombres, el 45% es mixto y apenas un 1% está formado exclusivamente por mujeres.

Esta cifra no solo evidencia una injusticia histórica, sino que revela un problema que afecta directamente el desarrollo de Chile: la falta de diversidad en los espacios de toma de decisiones. La experiencia, el talento y la mirada femenina siguen siendo subrepresentados donde más se necesitan para impulsar un crecimiento real, justo y sostenible.

Por eso, celebro que este 11 de agosto el Presidente Gabriel Boric haya promulgado la Ley “Más Mujeres en Directorios”, una medida concreta que abre las puertas de esos espacios de poder. La norma establece que en los directorios de sociedades anónimas abiertas y especiales ningún género podrá superar el 60% de participación, con una implementación gradual que busca cambiar estructuras desde la raíz. Además, el modelo “cumplir o explicar” obliga a las empresas a transparentar su cumplimiento o justificar sus razones.

Como dijo el Presidente Boric: “Las mujeres son más de la mitad de la población y merecen la mitad de la riqueza, del poder y de todo lo que producimos en Chile. Esta ley avanza en esa dirección porque las mujeres tienen que estar donde se toman las decisiones”. No es un favor, no es una cuota de cortesía: es un derecho que se debe garantizar.

Que haya más mujeres en los directorios implica que se escuchen más voces, se tomen decisiones con perspectivas diversas y se abran caminos para las generaciones que vienen. Que niñas y jóvenes crezcan sabiendo que liderar no es una excepción, sino una realidad posible. Que las empresas sean más innovadoras, justas y competitivas, porque está demostrado que la diversidad mejora los resultados.

Esta ley se suma a otros avances que buscan derribar barreras y construir un país donde las mujeres podamos desarrollar todo nuestro potencial sin límites ni discriminación. Me refiero a la Reforma de Pensiones, la Ley “Papito Corazón” y el Sistema Chile Cuida, políticas que valoran las diferencias, apoyan el trabajo de cuidados y defienden derechos fundamentales.

Más mujeres en directorios no es solo una conquista para nosotras, es un avance para todo Chile. Justicia, democracia, crecimiento y futuro. Porque cuando las mujeres estamos donde se deciden las cosas, las decisiones son mejores, más equilibradas y más justas para todas y todos.

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