Terapia CAR-T salva a 8 jóvenes con cáncer infantil agresivo

Un ensayo en el Hospital Universitario La Paz, en Madrid, logró que ocho pacientes menores de 24 años, desahuciados por leucemia linfoblástica aguda tipo B, eliminaran completamente el cáncer gracias a una terapia experimental de células CAR-T.
La ciencia volvió a dar esperanza donde antes solo había diagnósticos terminales. En España, un grupo de médicos del Hospital Universitario La Paz, en Madrid, logró resultados extraordinarios al aplicar una terapia experimental contra el cáncer conocida como CAR-T.
De los 11 jóvenes menores de 24 años que participaron en el ensayo, ocho eliminaron completamente el cáncer y, tras 20 meses de seguimiento, todos ellos siguen con vida.
Según informó el medio español El País, los pacientes padecían leucemia linfoblástica aguda tipo B, uno de los cánceres infantiles más agresivos y resistentes a los tratamientos convencionales. Todos estaban desahuciados antes de recibir esta terapia.
El ensayo, cuyos resultados fueron publicados en la revista científica eBioMedicine, alcanzó una supervivencia superior al 70%, lo que marca un avance histórico en la oncología pediátrica.
El estudio fue liderado por el pediatra Antonio Pérez-Martínez, quien explicó que, si bien los resultados son esperanzadores, “hay que tomarlos con cautela y continuar con más ensayos clínicos”. De los 11 pacientes tratados, cinco lograron someterse posteriormente a un trasplante de médula ósea, paso clave para consolidar la remisión.
¿Cómo funciona la terapia CAR-T?
La terapia de células T con receptores quiméricos de antígenos (CAR-T) consiste en extraer células inmunitarias del propio paciente, modificarlas genéticamente en un laboratorio para que puedan reconocer y destruir las células cancerígenas, y luego reintroducirlas en su organismo.
En este caso, los científicos incorporaron una molécula sintética capaz de detectar la proteína CD19, presente en las células cancerosas de leucemias y linfomas. El proceso convierte a las células del paciente en un “medicamento viviente”, que combate el tumor desde dentro.
El investigador estadounidense Carl June, pionero de esta terapia, ha señalado que más de 10.000 personas en el mundo ya han recibido tratamientos CAR-T, y algunos de sus primeros pacientes llevan más de una década libres de cáncer. “Es cara, pero funciona. La pregunta es cómo hacer que sea equitativa”, comentó recientemente, al anunciar nuevos ensayos para hacer accesible la tecnología en países de ingresos medios, como Costa Rica.
Aunque aún queda camino por recorrer, los resultados del Hospital La Paz confirman que la inmunoterapia celular no solo es el futuro de la medicina oncológica, sino una promesa tangible de curación para quienes ya no tenían opciones.
