Roban valiosas joyas de la corona francesa desde el Louvre

Un grupo de ladrones irrumpió en la Galería Apolo del Museo del Louvre y sustrajo ocho piezas de incalculable valor histórico, entre ellas collares, broches y tiaras que pertenecieron a emperatrices francesas. Una de las coronas cayó durante la huida.
El Museo del Louvre, uno de los recintos culturales más visitados del mundo, fue escenario este domingo de un robo histórico que dejó a las autoridades francesas en alerta y conmocionó al mundo del arte. Un grupo de entre tres y cuatro ladrones ingresó a la icónica Galería Apolo, donde se encuentra parte de la colección de las joyas de la corona francesa, y logró sustraer ocho piezas de enorme valor histórico y artístico.
Según reportó Deutsche Welle, los delincuentes accedieron al museo desde el exterior y permanecieron varios minutos en el interior, tiempo suficiente para forzar dos vitrinas blindadas y hacerse con el botín. Aunque el valor monetario de las joyas aún está siendo evaluado, los expertos coinciden en que su valor histórico es incalculable, ya que varias de ellas pertenecieron a la emperatriz Eugenia, esposa de Napoleón III, y a reinas como María Amelia y María Luisa.
Durante la huida, los asaltantes dejaron atrás una de las piezas más emblemáticas: la Corona de la Emperatriz Eugenia, confeccionada en cuero rojo, oro, 490 diamantes y 56 esmeraldas. Creada con motivo de la Exposición Universal de 1855, la corona fue devuelta a la emperatriz en el exilio y posteriormente legada a la princesa María Clotilde Napoleón.
Entre las joyas robadas, figuran:
- El Collar del conjunto de zafiros de la reina María Amelia y la reina Hortensia, compuesto por ocho zafiros de Ceilán y 631 diamantes, una pieza que destaca por su perfección técnica y articulación.
- El Broche relicario realizado por Alfred Bapst en 1855 para la emperatriz Eugenia, elaborado en oro y diamantes.
- El Collar de esmeraldas de Marie-Louise, regalo de boda de Napoleón a María Luisa en 1810, con 32 esmeraldas y 1.138 diamantes, considerado una obra maestra de la joyería imperial.
- La Tiara de la Emperatriz Eugenia, confeccionada tras su matrimonio con Napoleón III y adornada con perlas y diamantes en una compleja estructura vegetal.
- El Gran lazo del corpiño de la emperatriz Eugenia, originalmente parte de un cinturón compuesto por más de 4.000 piedras de los Diamantes de la Corona.
El Museo del Louvre confirmó el hecho y señaló que sus equipos de seguridad, junto a la policía judicial francesa, trabajan para identificar a los responsables y recuperar las piezas sustraídas. Las autoridades no descartan que el robo haya sido planificado con precisión, considerando el conocimiento que los autores tenían del sistema de vigilancia y la distribución de las salas.
Mientras tanto, el Louvre ha cerrado temporalmente la Galería Apolo para realizar una evaluación completa de daños y reforzar sus protocolos de seguridad. El suceso revive el debate sobre la vulnerabilidad de las grandes instituciones culturales frente a robos de obras y objetos patrimoniales de valor incalculable.